El Viaje de Aupa: De la Semilla a Su Taza
Cada sorbo de Aupa Café es el resultado de un meticuloso proceso que inicia con la cuidadosa selección de las semillas, cultivadas a altitudes óptimas para un desarrollo saludable y libre de químicos. Nuestros caficultores, con dedicación y esmero, nutren cada planta hasta que sus frutos alcanzan la madurez perfecta.
La cosecha es un ritual manual, donde solo las cerezas más maduras son escogidas para asegurar la uniformidad y calidad del producto. Tras desprender la cáscara en el despulpe, los granos se lavan y secan al sol, preparándolos para la transformación alquímica del tueste.
Nuestros expertos tostadores, guardianes del sabor, elevan la temperatura de los granos hasta más de 200°C, revelando los aromas y matices únicos de cada especialidad. Luego, cada grano es molido según su destino, liberando su esencia para un disfrute pleno.
En su taza, Aupa Café es más que una bebida, es el resultado de un viaje que combina pasión, tradición y maestría. Cada sorbo es una invitación a despertar sus sentidos y comenzar su día con energía y alegría.